Finalmente, luego de varios trimestres desalentadores, Intel reportó resultados financieros y proyecciones que alegraron al mercado, quienes impulsaron al alza el precio de sus acciones.

En detalle, en el segundo periodo de 2023, la compañía registró ingresos por USD 12.900 millones, marcando una caída interanual del 15%, pero un “efecto sorpresa positivo” del 7% frente a las estimaciones de Wall Street.

 A su vez, la ganancia neta trimestral se desplomó un 52% año a año hasta los USD 500 millones, pero el beneficio por acción ajustado fue de USD 0,13, cuando los analistas e inversores esperaban una pérdida por acción de USD 0,04.

“Nuestros resultados del segundo trimestre superaron el extremo más alto de nuestras proyecciones a medida que seguimos ejecutando nuestras prioridades estratégicas, que incluyen generar impulso con nuestro negocio de fundición y cumplir con nuestros planes de productos y procesos”, dijo Pat Gelsinger, director ejecutivo de Intel.

“También estamos bien posicionados para aprovechar el crecimiento significativo en todo el espectro de la inteligencia artificial al impulsar un ecosistema abierto y soluciones de silicio que optimicen el rendimiento, el costo y la seguridad para democratizar la IA desde la nube hasta la empresa, el borde y el cliente”, añadió.

Luego de la presentación de balances, las acciones de Intel subieron más de un 5% en Wall Street, por lo que ya se recuperan un 52% desde el mínimo de octubre de 2022, teniendo en cuenta sus dividendos.