Durante el primer semestre del año, las cadenas agroindustriales generaron ingresos de USD 24.000 millones para Argentina, un incremento del 19,4% en comparación con el mismo período del año anterior. Las exportaciones del sector agrícola representaron el 63% del total de exportaciones del país.
Según el Monitor de Exportaciones Agroindustriales de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina (FADA), Argentina ocupa el primer lugar mundial en exportaciones de jugo y aceite de limón, así como de aceite de soja. Además, el país es el segundo mayor exportador de maní, porotos y yerba mate, y el tercero en maíz y harina de soja. El trigo argentino llega a más de 25 países y sus uvas y vinos son disfrutados en más de 80. La carne vacuna del país también es altamente demandada, siendo exportada a más de 50 países.
El informe señala que el 72% de las agroexportaciones proviene de las cadenas de granos, mientras que el 13% está relacionado con las economías regionales, el 8% con las carnes, y el 2% con los lácteos. El 5% restante corresponde a otros sectores agrícolas.
La economista Natalia Ariño destacó las características regionales de las exportaciones: “La Patagonia se especializa en productos pesqueros, peras y manzanas; la Región Pampeana en soja, maní, girasol, maíz, trigo, cebada, carne vacuna, lácteos y carne aviar; Cuyo en la industria vitivinícola; el Noreste en el sector forestal, té y yerba mate; y el Noroeste en limón, porotos y garbanzos.”
Para 2024, FADA prevé exportaciones de entre USD 45.000 millones y USD 50.000 millones, lo que representaría un aumento de USD 12.000 millones respecto a 2023. “Esto se logra a pesar de no contar con las mejores condiciones. Hay un gran potencial de crecimiento tanto en el agro como en otros sectores de la economía. Es crucial que todos avancen juntos”, concluyó Pisani Claro, economista jefe de FADA.