En medio de la inestabilidad no sólo económica, sino también financiera y política, renuncia Martín Guzman del ministerio de Economía y asume, la flamante nueva Ministra de Economía Argentina, Silvina Batakis. 

Precisamente asume un 4 de julio, feriado en EEUU por el día de la independencia, por lo que, la repercusión a nivel internacional de los bonos argentinos tuvo que esperar hasta el martes 5 de julio.

Los principales efectos de su entrada al ministerio los podemos resumir en algunos puntos:

• El riesgo país alcanzó un nuevo récord desde la reestructuración de la deuda con los acreedores privados que realizó el Gobierno hace casi dos años y superó los 2500 puntos básicos. 

• Se acentuó el espiral inflacionario.  Los precios que componen la canasta básica de alimentos mostraron subas del 2,5% promedio y las principales consultoras proyectaron una inflación anual cercana al 90%.

• Los bonos argentinos en dólares bajo legislación extranjera terminaron la jornada del día martes 5 de julio con grandes desplomes. La tasa interna de retorno (TIR) de los bonos argentinos se encuentra cercana al 40% anual en dólares; cuando los países de la región rinden 5% o menos.

• Las acciones de empresas argentinas no quedaron exentas de este efecto: casi todas terminaron la jornada con bajas en Wall Street. Algunas excepciones fueron para empresas en las que los inversores visibilizaron como oportunidad, al estar tan baratas en dólares. Esto lleva implícito un mayor riesgo asociado.

• El temor de la población por la incertidumbre activa una alerta y los individuos se corren del peso y demandan dólares. Así, la divisa en el mercado paralelo se disparaba $17 y finalizaba el viernes en $272 para la venta.

Quizás estamos acostumbrados a las repercusiones económicas frente a cambios en los ministerios y gabinetes. Pero esto tiene de trasfondo un solo fenómeno: la inestabilidad económica y financiera de nuestro país.  ¿Cómo puede ser que el recambio de una sola persona a nivel político tenga todos estos efectos asociados? ¿Esto sucede en la mayoría de los países? Ya podemos advertir que la respuesta es negativa.

En las economías estables, con un crecimiento continuo, con incrementos moderados y controlados en el nivel de los precios, con un sistema financiero ampliamente desarrollado; el cambio de un individuo en algún ala del gobierno no mueve ningún índice; no incrementa el precio de la divisa extranjera ni cambia el riesgo de un país en los mercados internacionales. 

Es que Argentina hace tiempo está sumida en una estanflación constante y sonante. Es esta situación en la que se evidencia una combinación de estancamiento económico en términos de producto, y un alza constante en el nivel de los precios. 

Parados en esta vereda, es evidente advertir que cualquier cambio -por mínimo que fuera- en el nivel político repercutirá, casi con un efecto dominó, en todas las esferas de la economía. 

No es ni la ministra de economía Argentina Batakis, ni el ex-ministro Guzmán. Son las señales que damos al interior y al exterior de nuestra economía, que vienen siendo, desde hace años, de inestabilidad y fragilidad financiera.


Agustina Huespe – Lic. En Economía

Ramiro Goncalves – CEO de RG Inversiones

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