El aumento de la inteligencia artificial (IA) está elevando los precios de muchas acciones, como las de
Nvidia, Dell, Microsoft y Alphabet. Sin embargo, en el caso de esta última empresa, existe el riesgo de
rezagarse con la nueva tecnología, lo que podría golpear duramente a los inversionistas.
“El hecho de que Alphabet se quede atrás en el ámbito de la IA es una amenaza clara y presente”,
comentó Tom Graff, jefe de Inversiones en Facet. “La desventaja es tan grande para Alphabet que
realmente no se puede evaluar”, agregó.
Según el experto, a pesar del gran tamaño del negocio de publicidad digital de Alphabet, que generó
más de USD 100.000 millones en efectivo el año pasado, existe el peligro de que otra empresa
desarrolle un motor de búsqueda basado en IA que deje obsoleto al de Google.
Por más improbable que parezca este escenario, es lo que está preocupando al mercado. De hecho,
esta semana, la tecnológica perdió USD 80.000 millones de valor después de que se revelara que su
producto insignia de IA estaba fallando.
Actualmente, Google representa aproximadamente el 91% del mercado mundial de motores de
búsqueda, mientras que Bing, de Microsoft, tiene el 3,4%, según Statista. Sin embargo, la incorporación
de IA en Bing podría representar un desafío para Google. “Por supuesto, tiene una posición sólida en la
búsqueda, pero este espacio está a punto de ser perturbado”, destacó Ben Reitzes, analista en Melius
Research.
Según el experto, Alphabet está siendo superada por sus competidores de gran capitalización en
términos de crecimiento, ingresos recurrentes y optimización de márgenes, lo que pronto podría
reflejarse más en el precio de sus acciones.
No obstante, algunos participantes del sector financiero apoyan a la compañía y recuerdan que es un
verdadero pionero en el sector. “Desde que OpenAI lanzó ChatGPT a finales de 2022, la respuesta de
Google se asemeja más a la de un culturista al que le han dicho que sus músculos están al descubierto,
buscando pelea y recibiendo una paliza”, escribió Mark Shmulik, de Bernstein.
“Cuando las respuestas de IA generativa hayan ganado la confianza de los consumidores, Google
debería estar mejor posicionada para integrar estos resultados junto con los resultados de consultas
web, ofreciendo así a los consumidores lo mejor de ambos mundos”, concluyó.